Muy cerca de Astorga en el corazón de la región de Maragatería, este restaurante ocupa una gran casa de piedra que alguna vez fue utilizada como lechería, de ahí su nombre. Ambiente neo-rústico bien mantenido con un enfoque en la cocina tradicional actualizada con un toque creativo; aunque el plato de la firma aquí es el guiso local (cocido maragato). Algunas habitaciones acogedoras también están disponibles.