Todo comenzó hace muchos años cuando un joven matrimonio, Mari y Manolo, tenía una pequeña heladería en Fernando el Católico. Para entonces, comenzaban a llegar a los americanos a la Base en Zaragoza. Su paso por este establecimiento fue mayor, convirtiéndose poco a poco en una barra convencional. Como resultado, un día propusieron que estos dos jóvenes comenzarían a hacer hamburguesas, producto que echaban menos de su tierra. Fue un cocinero americano de la base quien en 1957 les enseñó y les dio la única receta de nuestras hamburguesas, siendo esta forma uno de los pioneros en España. De ahí, que la forma de nuestras hamburguesas mar alargada, ya que al no haber panecillos redondos hubo que amoldarse al pan de la época; así como, la inexistencia de kétchup, nos llevó a una salsa de tomate casera que perduró hasta hoy en día. En 1977 toma el relevo la segunda generación del Nevada, ampliando su carta con nuevos bocadillos para satisfacer a sus clientes. Actualmente se encuentran trabajando a mano la segunda y tercera generación, son objetivos que siguen siendo los mismos: continuar con nuestra receta familiar, mantener la calidad de nuestros productos y seguirnos cuidando a nuestros clientes.